Cuando los servicios sociales o de infancia detectan que un menor, en el seno de una familia con dificultades, se encuentra en riesgo, un equipo interdisciplinar trata de ayudar a la familia a superar la situación y se asegura de afianzar la protección del menor. Se ha habilitado y equipado una nueva sede para el programa, en el que trabajan 14 personas.